Tijuana, B. C., 13 de mayo de 2019. Siempre es bueno comenzar con las noticias amables, por lo que, en esta ocasión, les hago participes de la grata experiencia que tuve, al compartir parte de mi experiencia laboral en el extranjero con estudiantes de la licenciatura en Negocios Internacionales de la UABC. De nueva cuenta, expreso mi gratitud por su invitación y gentiles atenciones, particularmente a su maestra, la licenciada Marcela Iturralde.
Continuando con temas positivos, he recibido varias invitaciones para presentar mi libro “Tijuana. Patria, Revolución e Identidad”, por lo que pronto tendrán noticias al respecto. Por lo pronto, aprovecho para recordar que se encuentra disponible en la Sociedad de Historia de Tijuana, en sus horarios habituales.
Con respecto a la situación electoral que prevalece en nuestra región, comenzaré refiriéndome a los “debates”. Entrecomillo la palabra porque, desde mi perspectiva, los conversatorios organizados por el IEE carecen de los elementos que lo identifiquen de tal manera. Sin embargo, es preciso reconocer que hubo una notoria mejoría entre en el ejercicio realizado el 28 de abril y el 12 de mayo, particularmente en iluminación, sonido y, lo más importante, el formato.
Los contendientes tuvieron mayor oportunidad de expresarse y mayor dinamismo en el escenario. Analizándolos conforme a la antigüedad de partido, Óscar Vega, del PAN, ha perdido toda naturalidad como consecuencia del exceso de ensayo. Enrique Acosta, del PRI, debe suavizar su lenguaje corporal. Martínez Veloz, del PRD, debe poner mayor esmero en su imagen. Jaime Bonilla, de la coalición, no fue. “Nacho” Anaya logró su objetivo, llamar la atención. Osuna Jaime, fiel a su estilo, le sugiero utilizar más la mano izquierda y continuar sonriendo.
Con respecto a los candidatos a diputados por los 17 distritos, destaco tres cosas: primero, es bueno ser auténtico, pero si el candidato tiene cierto parecido con “Layín”, es mejor evitar el sombrero. Dos, interesante propuesta de Fausto Gallardo para crear una Fiscalía Ambiental, pues la realidad actual nos indica que el cuidado ecológico es una necesidad primordial. Por último, una recomendación para todos: ¡dejen de autoproclamarse vencedores! Ya que, como lo dije antes, no existe un debate. Además, continuar una práctica tan obsoleta como la simulación es una pésima estrategia.
A la mayoría de los aspirantes a presidente municipal de Tijuana solo puedo recomendarles que apliquen la máxima de “a donde fueres, has lo que vieres”. Deben poner mucha más atención en su atuendo.
Retomando el encuentro entre quienes desean ser gobernador, considero oportuno mencionar el zipizape que surgió cuando entre ellos, cuando señalaban la incongruencia partidista. Vega habló del idealismo blaquiazul, Acosta y Osuna Jaime le espetaron que ese PAN ya no existe. Mientras, Anaya, en su afán por destacar las ventajas de elegir a un partido local, arremetió contra el “PRIMOR”.
La realidad es que la herida de PAN y del PRI, sigue abierta. Situación que muchos entienden como una lenta y humillante agonía; otros, anhelan que así sea. En lo personal, sugiero que permitan que la herida sane con serenidad y decoro. Ello requiere que, primero, la herida “respire” y segregue todo el “pus” que la infesta.
Post Scriptum. “Sólo hay dos palancas que mueven a los Hombres: el miedo y el interés”, Napoleón Bonaparte.
* El autor es consultor político, catedrático y escritor.
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